¿Cansado de buscar destinos para tu viaje de novios? El empresario catalán Joan Antón Sánchez Carreté, experto en África, y Carla Monroy, periodista especializada en viajes románticos nos dan las claves para escoger el destino que mejor se adapte a cada pareja.
Casarse y celebrarlo con un viaje de ensueño es uno de los momentos más especiales de nuestra vida. Uno de esos acontecimientos que por mucho tiempo que pase no nos cansamos de recordar o contárselo a todos nuestros amigos. “Es importante que tengamos claro hacía donde queremos enfocar el viaje, y estar de acuerdo en el objetivo el mismo”, afirma Carla. “Existen multitud de destinos adaptados a las diferentes modalidades de viaje que cada uno plantee: viajes para disfrutar del relax, de la aventura, hacer turismo o moverse por las urbes más cosmopolitas”, añade Carreté.
La primera recomendación del empresario Joan Antón Sánchez Carreté, que conoce África como la palma de su mano son las islas Seychelles. “Es uno de los lugares más paradisiacos que conozco que se caracteriza por la armonía que crean sus diferentes paisajes. Se puede disfrutar tanto de las playas de arena blanca como los maravillosos bosques frondosos”, dice.
“Es el enclave perfecto para disfrutar de tu pareja aunque existen muchas opciones que hacen que te olvides de la monotonía y que disfrutes de la aventura que contagian estos paisajes naturales como el Valle de Mai en Praslin, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO”, afirma Sánchez Carreté. Una de las actividades más impresionantes que se pueden practicar en la isla es el snorkeling en la playa de Baie Ternay. Según el catalán, “es fundamental sumergirse y observar la variedad de peces exóticos. ¡Es una gozada!”
Por otro lado, Carla Monroy, ha recorrido medio mundo en busca de los parajes más románticos y nos propone un viaje a Bangkok. “París, Roma o Venecia no son los únicos sitios románticos del planeta. Existen muchas otras opciones menos turísticas que encandilan a todo el que las visita”, dice Carla. “Es un viaje en el que se puede disfrutar de la cultura local sin dejar de visitar los lugares más emblemáticos como templos, mercados o incluso rascacielos. Es una ciudad que nunca duerme y que te impresionará en cada uno de sus rincones”, afirma Monroy. Además, según Carla “no hay nada más reconfortante que relajarse al final del día con un masaje relajante tailandés o un crucero por el río Chao Phraya.al caer la noche”.
