La facturación electrónica en Paraguay ha venido avanzando de acuerdo a la planificación establecida por la Subsecretaría de Estado de Tributación (SET), ente gubernamental encargado de la implementación del Sistema Integrado de Facturación Electrónica Nacional – SIFEN, que actualmente se encuentra en el desarrollo del Plan Piloto, y el próximo 1 de Abril inicia su fase de Adhesión Voluntaria.
Esta metodología permite mejorar los procesos de recaudación fiscal del Estado paraguayo, al minimizar las posibilidades de fraudes o evasión fiscal. También permite a las empresas cumplir de forma oportuna con sus compromisos tributarios y obtener beneficios para mejorar los procesos de control, entre los más importantes se tiene:
Mayor control de los comprobantes
La gestión de comprobantes físicos resulta bastante complicada, ya que se requiere un espacio físico para su almacenamiento, así como carpetas y archivadores o armarios para guardarlos de forma ordenada, con el riesgo de que siempre puedan traspapelarse o extraviarse. Además, el proceso para ubicar una factura o comprobante siempre tiende a ser engorroso y a ocupar un tiempo considerable.
El almacenamiento y gestión de los documentos electrónicos tributarios (DTE) resulta mucho más sencillo, ya que se realiza de forma digital en medios de almacenamiento como discos duros (HDD) o discos de estado sólido (SSD), además los servidores de almacenamiento cuentan con sistemas de gestión intuitivos, amigables y muy fáciles de utilizar, lo que el control de los comprobantes sea más sencillo, efectivo y seguro.
La facturación electrónica permite no sólo que el proceso de facturación se realice de forma rápida sencilla y eficiente, sino que también permite que ubicar un documento sea realmente sencillo, ya que se emplea una clasificación que permite búsquedas intuitivas, además, facilita el proceso de las auditorías.
Posibilidad de rastrear cualquier transacción
Las empresas requieren de un eficiente control interno para mejorar su operatividad, la facturación electrónica les garantiza un mayor control interno, ya que permite rastrear cualquier transacción, así como analizarlas con la periodicidad deseada.
Los datos de cada comprobante son almacenados en bases de datos de forma ordenada, por lo que se puede acceder a ellos de forma rápida y efectiva en el momento que se necesite y desde cualquier área de la empresa, lo que permite detectar de forma oportuna cualquier tipo de problema como pérdidas en el inventarios o inconsistencias en los reportes financieros.
Vale recordar, que estos son algunos de los problemas más comunes que se presentan cuando se tiene un sistema de facturación tradicional.
Minimización de riesgos fiscales
Migrar a la facturación electrónica posibilita a las empresas tener un manejo contable más ordenado y ajustado a la realidad, de esta forma se cuenta con toda la información para realizar las declaraciones de impuestos de forma oportuna y sin errores. De hecho, se mantiene una comunicación permanente con la Subsecretaría de Estado de Tributación (SET).
Esto permite la disminución de los riesgos fiscales, es decir, la empresa no estará expuesta a multas o sanciones por demoras o errores en las declaraciones o pagos. Además, podrá aprovechar todos los beneficios que brinda la legislación tributaria de Paraguay.