Es un hecho común que a las personas se nos presenten situaciones que no podemos afrontar sin apoyo y asesoría legal, ahí la importancia de contar con un buen abogado que nos represente y se encargue de poder solucionar cualquier caso legal para que obtengamos los mejores resultados.
El mundo legal es muy amplio y se necesita de apoyo especializado que nos oriente ante cualquier situación de índole legal, como redacción de documentos, trámites legales ante organismos públicos o privados, reclamaciones, o para asumir nuestra defensa en cualquier caso civil, mercantil o judicial en el que nos veamos inmiscuidos.
Los abogados son profesionales que han seguido una carrera universitaria y por lo general cuentan con una especialización en una área o rama del Derecho, pueden ejercer libremente su profesión como abogados independientes o formar parte de la plantilla de un bufete o estudio, que reúne un equipo de especialistas para ofrecer servicios de alta calidad.
Características de un buen abogado (VER AQUI)
Una de las principales características que debe tener un buen abogado es la facilidad de comunicarse con las personas, ya que en su trabajo cotidiano deben tratar con muchas personas y deben poder mantener con ellas una comunicación fluida y efectiva, para entiendan de forma sencilla lo que les acontece en el mundo legal, también deben tener una gran capacidad para plasmar por escrito sus ideas y los alegatos de sus clientes.
Necesita además, entender todo lo que le cuentan sus clientes, otras personas, así como los expertos o peritos, que en diversas ocasiones necesitan actuar en un caso, ya que él es quien les representa y es su voz ante jueces y otras autoridades, por ello es importante que podamos entendernos muy bien con nuestro abogado.
Los abogados necesitan ser verdaderos investigadores, capaces de investigar en todo momento para hallar una solución efectiva a una determinada situación legal, necesitan estudiar una gran variedad de documentos y registros y seguir pistas, que a veces nacen de situaciones a que a nosotros nos pasan desapercibidas, pero a su criterio de experto no escapan.
Los abogados, por lo general se especializan en una rama del Derecho, así pueden ofrecer servicios de mayor calidad, por ello es necesario contactar con un profesional especializado en el área legal que atañe a nuestro caso, entre los diferentes tipos de abogados encontramos:
- Abogados penalistas: se encargan de asesorar y representar a sus clientes en casos relacionados con asuntos penales, es decir donde hayan acciones selectivas, se encargan de la defensa del cliente y sus intereses ante un tribunal.
- Abogados civiles: se dedican a representar y asesorar a las personas en casos relacionados con asuntos civiles, como pueden ser casos de herencias, divorcios, separaciones, incapacidad, cobro de dudas, etc, estos casos se llevan ante un juzgado civil y pueden ser resueltos por mutuo acuerdo de las partes.
- Abogados mercantiles: se encargan de asesorar y representar a las personas jurídicas en todos los casos o trámites relacionados con la creación de empresas, fusiones, compras o adquisiciones, etc.
- Abogados laborales: se encargan de asesorar y representar a sus clientes en casos relacionados con el mundo laboral, problemas que pueden surgir entre patrones y trabajadores, bien sea en el ámbito público o privado.