Un préstamo financiero es una operación realizada por dos partes, primero, el prestamista, quien entrega a la otra persona, el prestatario, una cantidad de dinero que debe ser devuelto en un tiempo determinado, junto con una cantidad de intereses que se dan durante el tiempo que fue utilizado el dinero (siendo éste normalmente acordado por ambas partes del acuerdo).
Con frecuencia, para que el prestamista tenga la seguridad que tendrá su dinero de vuelta, debe ofrecerse una garantía por parte del prestatario, ya que, si se llega a incumplir el pago, se podrá utilizar dicha garantía (carro, casa, celular, etc.), para recuperar el capital. Todos los préstamos (ver Pronto) cuentan con elementos que los conforman, los mismos se explicaran a continuación:
Las partes contratantes
En todo contrato o acuerdo, existen dos partes, aquí es donde influyen: el prestamista (el ente o la persona que presta la cantidad de dinero) y el prestatario (la persona que recibe el dinero del ente o prestamista, viéndose obligado a cancelarlo junto con los intereses).
El tipo de interés
Siendo esta la ganancia que recibe el prestamista gracias al aporte del capital que ofreció al prestatario, normalmente se calcula con un porcentaje seleccionado por ambas partes.
Cabe resaltar, que existen muchos tipos de intereses, encontramos: el interés fijo, el interés variable, el porcentaje de tasa anual, el interés simple y el interés compuesto, que se elegirá de acuerdo a las posibilidades del prestatario, y a las necesidades y condiciones del prestamista.
El plazo
Es la duración del préstamo ejecutado, desde que se otorga, hasta que se devuelve el dinero en totalidad. Durante la vigencia de dicho préstamo, el prestatario deberá recibir los pagos de los intereses de manera periódica, más una cuota del capital principal (si es que se acordó así al momento de consumar el acuerdo).
El importe o capital principal
Supone la cantidad de dinero que ha sido prestado, sobre el cual se aplicarán unos intereses que variarán dependiendo de la duración y de la cantidad de capital, dichas cantidades deberán ser canceladas por quien adquiere el préstamo.
Las comisiones y gastos
Este elemento no siempre se encuentra presente en un contrato de prestación de dinero, pero, en aquellos préstamos, que son otorgados por entidades bancarias, si aplican. Entonces, la comisión sería el precio equivalente al servicio que se está ofertando, en este caso, la prestación del dinero; y los gastos, que son desembolsos económicos que debe soportar la entidad para prestar el servicio.
El soporte documental
Aquí nos referimos al contrato, o el papel donde se demuestre el acuerdo que hubo entre ambas partes, donde debe encontrarse toda la información del préstamo, la cantidad, las fechas de inicio y de culminación, el porcentaje de interés, el tipo de interés, las fechas de las cuotas, en fin, todo lo requerido para llevar a cabo el contrato con facilidad.
En conclusión, un préstamo es una operación que debe llevarse a cabo con mucho cuidado, incluyendo sus elementos, y teniendo muy claras las condiciones para evitar algún problema a futuro que pueda llegar a suceder