La planificación adecuada de una estrategia de testing o pruebas conduce a la ejecución exitosa de todo proyecto de software. Durante mucho tiempo, las pruebas de software han sido consideradas como un algo molesto para los proyectos de desarrollo clásicos. Sin embargo, actualmente muchas empresas gastan una parte significativa de su presupuesto de TI en pruebas de software. En esencia, esta es la única manera de cumplir las expectativas de calidad de los clientes a largo plazo.
Las pruebas de software suelen ser el último paso en la construcción de un programa para comprobar su nivel de calidad. Los defectos que una prueba busca identificar incluyen errores de compatibilidad, errores de algún algoritmo, requisitos que no se pueden completar, limitaciones de hardware, etc. La lista es grande y crece con el tamaño del programa.
Para no enfrentarse a problemas de calidad del software cuando ya es demasiado tarde, muchas empresas se toman muy en serio las pruebas previas al lanzamiento. Hoy en día, ya son muchas las empresas que han adoptado un enfoque de pruebas continuas, y la tendencia va en aumento.
La planificación de pruebas bien pensada y bien fundamentada es la clave para un proyecto de prueba exitoso, incluso si las pruebas durante el ciclo de vida de una aplicación representan entre el 25 y el 50 por ciento de los costos totales incurridos.
Antes de diseñar y planificar una estrategia de testing, es importante tener claros los problemas y riesgos, para poder descartarlos desde el principio, o al menos estar preparado para ellos. Por un lado, el responsable de las pruebas tiene que actuar activamente desde el principio y no de forma reactiva meramente.
Asimismo, en la práctica, el equipo del proyecto suele ser un desafío cuando se planifican pruebas de software. Las empresas deben aclarar de antemano si hay suficientes evaluadores experimentados disponibles y si están motivados. También influye si el equipo tiene tiempo o si está sobrecargado de trabajo. Otra recomendación sería mantener un equipo estructurado y no masivo para reducir los canales de comunicación y formular las tareas con claridad.
Además del factor personal, la prioridad del proyecto dentro de la empresa también puede ser un desafío. Si al mismo tiempo se están ejecutando otros proyectos que son más importantes para la gestión, también puede haber dificultades en el proceso. Lo mismo se aplica si la gerencia tiene expectativas exageradas con respecto a los plazos, los costos y la calidad. Además de estos factores «suaves», también hay algunos hechos difíciles a considerar. Cambiar los servidores o el almacenamiento de datos en la nube puede tener un impacto en el software a probar, por ejemplo, al igual que cambiar las bases de datos.
Es necesario tener en cuenta que las pruebas deben basarse en la estrategia de TI. Cuando se conocen suficientemente los retos, se puede iniciar la concepción, planificación y organización de las pruebas. El primer paso es desarrollar una estrategia de prueba como base para los procesos de prueba correctos. La estrategia también debe aplicarse a toda la empresa y basarse en la estrategia de TI. La documentación debe resumir los principios, el enfoque y los objetivos clave de una organización con respecto a las pruebas.