Un servidor virtual o VPS ofrece a empresas de todos los tamaños y sectores una forma viable de contar con el servicio de hosting adecuado, ya que por un costo muy accesible pueden contar con los recursos necesarios para garantizar el nivel de operatividad de sus sitios o proyectos web, con características muy similares a las de un servidor dedicado.
Esto es posible ya que los avances en la tecnología de virtualización permiten crear diversos servidores virtuales dentro de un servidor físico, cada uno de estos VPS funciona de forma totalmente independiente, brindando recursos exclusivos de CPU, memoria RAM, almacenamiento y ancho de banda, lo que hace que se comporten como servidores dedicados.
Se trata de una solución de alojamiento web que ofrece grandes beneficios, entre los que destacan:
Escalabilidad
Uno de los principales beneficios de contratar un servidor virtual o VPS es la escalabilidad, ya que todo proyecto web tiene planes de expandirse. Sin embargo, no puede predecirse la cantidad de tráfico o el volumen de transacciones que tendrá, con el hosting VPS no hay ningún problema, ya que se puede contar con los recursos que se necesiten de forma inmediata.
A diferencia del servidor de alojamiento compartido, el hosting VPS se adapta al crecimiento del sitio web, por lo que se pueden ampliar las operaciones sin tener que migrar a un nuevo servidor, simplemente hay que ampliar el plan de hosting y se tendrá los recursos necesarios sin ningún tiempo de inactividad.
Control total del servidor
Otro de los beneficios que ofrece el hosting VPS es que se tiene control total del servidor, lo que permite configurarlos de la forma que se desee, sin necesidad de esperar la habilitación del proveedor de hosting. No obstante, los proveedores brindan asistencia y apoyo técnico para garantizar la operatividad del servidor en caso de que el usuario no cuente con la experticia suficiente para su administración.
En un VPS se puede instalar software personalizado con total libertad, algo que es muy complicado en los servidores compartidos, que presentan muchas limitaciones.
Mayor rendimiento
Un servidor virtual, a pesar de estar dentro de un mismo servidor físico, trabaja de forma independiente y no se ve afectado su rendimiento por los demás servidores virtuales, lo que garantiza recursos exclusivos, algo que no ocurre en el hosting compartido, ya que todos los proyectos comparten un mismo servidor y compiten por acceder a los recursos.
Contar con un servidor privado permite que el sitio web mantenga un alto nivel de funcionalidad y carga mientras aumenta el volumen de tráfico, ya que cuenta con recursos dedicados y no se ve afectado no afecta el rendimiento de otros sitios web.
Alojar diversos dominios
Una empresa o marca pueden contar con varios proyectos web, contratar un servidor virtual o VPS le permite contar con todos los recursos para alojar diversos dominios y contar con los recursos necesarios que garanticen el funcionamiento óptimo de cada sitio web.
En el momento que se requiera de más recursos, simplemente se contratan y se puede disponer de ellos en forma inmediata.