Las empresas tanto las grandes como las pequeñas, las que tienen poca experiencia y las que están iniciando se ven frente a la necesidad de captar clientes y luego fidelizarlos, siendo esta última una acción aún más compleja, pues esto les permite consolidar ventas y generar los ingresos que necesitan.
Para ello, existe una herramienta extraordinaria y se trata del marketing de contenidos, de hecho ha sido un tema tendencia durante los últimos años, cuando se dice que el contenido es el rey se refieren a este tipo de marketing digital.
En pocas palabras consiste en desarrollar un tipo de contenido que se propone captar la atención de los clientes potenciales, debido a su originalidad y calidad, así como generales valor y serles de gran utilidad, gracias a que responde justo a sus intereses y les permite obtener respuestas a sus preguntas.
Luego de captar la atención del cliente y de servirle, este contenido se gana su confianza, esto quiere decir que la empresa pasa a ser una figura de referencia dentro del sector y por ello finalmente realiza la compra, se convierte en cliente e incluso se fideliza y comparte su experiencia con otras personas quienes progresivamente también pasar a formar parte de la cartera de clientes.
Cabe destacar, el marketing de contenidos se encuentra alejado de la publicidad convencional que no genera valor al cliente, al contrario se enfoca directamente en dar promoción al producto o servicio y buscar que sea comprado, mientras que el marketing de contenidos no interrumpe y ofrece valor antes de hacer cualquier solicitud.
¿Cómo se desarrolla y dónde se publica el contenido?
Partiendo de que la información que propone el marketing de contenidos debe ajustarse a las necesidades de los clientes, se hace imprescindible identificar cuál es el tipo de público específico al que se dirige e indagar sus particularidades, este es el primer paso.
En cuanto a los medios en los que se publica, se suele comenzar por el sitio web oficial de la empresa, pero este no debe ser la única plataforma, conviene apostar por foros, blogs, otras páginas web, sitios como Youtube, directorios y por supuesto las redes sociales.
Estas son obligatorias gracias a la gran cantidad de usuarios a los que se puede llevar, además de poder interactuar con ellos para al mismo tiempo obtener su información, es decir, a través de comentarios que se incentivan en cada publicación.
Igualmente, no se trata solo de publicar este contenido útil a través de textos, para que realmente sea atractivo todo debe ser innovador, por eso se debe utilizar también otros formatos como imágenes, whitepaper, webinars, infografías, videos, plantillas, podcasts, newsletters, entre otros.
Una acción que también resulta muy recomendable para el marketing de contenidos, es crear un calendario editorial, allí se establecen cada uno de los diferentes temas a desarrollar, así como el formato empleado para cada uno y la fecha exacta de publicación. Esto contribuye a un orden que puede favorecer de manera importante la efectividad de todo el proceso.